Tras terminar la carrera de Nutrición me embarqué en la aventura de mi vida, dejar mi familia, mis amigos y mi hogar para cruzar el Atlántico con el hombre que había robado mi corazón. Fue, y sigue siendo, una experiencia muy positiva pero debo confesar que el cambio no fue nada fácil.

Un nuevo hogar, un nuevo país, costumbres y alimentos diferentes acentuaron aún más mi estreñimiento, estómago hinchado tras las comidas y una piel y cabello muy secos además del acné que apareció en mi cara (y eso que jamás había tenido un granito en la cara durante mi adolescencia). Y qué deciros de mi humor… ¡subidas y bajadas incontrolables! No me sentía tan entusiasta como de costumbre, no me sentía bien en mi cuerpo.

Esa no era la Carla que yo quería, así que con mi fe en el poder de los alimentos empecé a explorar otras teorías alternativas sobre la alimentación. Sabía que me faltaba algo más por descubrir sobre la nutrición que no había aprendido en la universidad, y que eso sería el secreto de una salud óptima. Empecé a leer artículos y libros sobre nutrición holística, complementé mis estudios de nutrición en el Instituto de Nutrición Integrativa de Nueva York donde aprendí más de mil teorías dietéticas,  y participé en seminarios del Optimum Health Institute una reconocida clínica de terapias alternativas en San Diego, California, donde tratan a enfermos de cáncer y otras enfermedades severas.

Todos los conocimientos que iba ganando me llevaron a seguir una alimentación más limpia, más natural y muy rica en productos vegetales. Me enseñaron a escuchar mi cuerpo y saber escoger los alimentos según mi estado de ánimo y necesidades y lo mejor de todo, poquito a poco vi desaparecer todos estos síntomas que no me dejaban disfrutar de mi salud con plenitud. Desde entonces, mis digestiones no son nada pesadas, no he vuelto a sentirme hinchada sino al contrario, puedo disfrutar de un vientre liso, mis cara vuelve a estar limpia, voy al baño como un reloj (algo que ya había considerado batalla perdida), puedo disfrutar de una piel hidratada, un cabello fuerte y brillante y lo mejor de todo, he recuperado mi optimismo y mis ¡ganas de comerme el mudo!

Tras haber experimentado estos resultados tan motivadores en mí, me di cuenta realmente de la falta de información que existe en la población (empezando por mí, y eso que salía de la facultad de nutrición…) y de cómo el consumismo nos empuja a seguir unos patrones que nos hacen caer enfermos.

Así es como surgió la idea de preparar un programa DETOX (un curso exprés de 2 semanas) para poder compartir los conocimientos de este aprendizaje con todos vosotros. En este programa no solo se ponen en evidencia los alimentos que nos perjudican la salud, sino que se aprende a cómo eliminarlos progresivamente y a incorporar en nuestra alimentación nuevos y deliciosos ingredientes que nos ayudarán a limpiar y restaurar el organismo obteniendo como resultado ¡maravillosos beneficios!

¿Qué dicen del programa DETOX?

“El programa DETOX es un programa altamente recomendable para hacer una limpieza del cuerpo. Te sientes ligera y limpia en un tiempo récord. Te das cuenta de la importancia que tiene tu alimentación en tu día a día. Cuando comes bien rindes mejor en el trabajo, estás mejor en casa, con tu pareja, parece que todo fluya mejor. A mí,  personalmente, el programa me ha traído un optimismo y una confianza  conmigo misma brutal. Quiero añadir que el feedback con Carla durante todo el programa es genial.” – Rosa Prat

“Hace dos años me mudé a Suiza con mi pareja y la adaptación al nuevo país me costó muchísimo. Recién llegada no tenía casi nada que hacer, los días eran largos y me refugié en la comida. Engordé más de 10 kilos casi sin darme cuenta. Cada vez me sentía más triste y sin energía (por más café que bebiera, 5 o 6). A veces me levantaba para desayunar y volvía a la cama. Sabía que tenía que acabar con esta situación pero me faltaba la fuerza, la energía. Me salieron manchas rojas en las manos, los codos y la cara (tipo psoriasis) y empecé a tener pérdidas de sangre por la orina. Los médicos decían que todo estaba bien… Al final pensé que si los médicos no encontraban nada quizá la sangre era como una señal de fatiga, malhumor, tristeza… Debía hacer algo y justo fue cuando descubrí el programaDETOX de Carla.
La primera semana perdí casi 5 kilos. La piel de la cara estaba finísima y brillante y ni rastro de manchas. Un mes después ya había perdido unos 10 kilos, el pelo se veía sano y brillante, y lo más importante, el sangrado con la orina desapareció por completo. Estos resultados me convencieron de que lo que comemos puede hacernos mal o bien. Ahora, dos meses después, he perdido unos 16 kilos, me siento muy contenta, llena de energía desde que me levanto, con varios proyectos que me tienen ilusionadísima, voy cada día al gimnasio,… Feliz 🙂 “ – Eulalia Roca

“Desde la primera semana del programa DETOX ya se notan resultados. He perdido peso, la calidad de la piel ha mejorado muchísimo ya que la tenía extremadamente seca y por más que me diera cremas seguía agrietada y reseca, en particular en las piernas y los talones. Me ha encantado descubrir recetas deliciosas e ingredientes nuevos, indagar en las combinaciones de los alimentos, conocer las propiedades de algunos y en general, experimentar los beneficios de una dieta verde y cruda, como el mencionado de la piel y el pelo, un estado mental más clarividente, y una mayor templanza. He disfrutado mucho preparando los platos recomendados, que implican poca preparación y lo que más me ha gustado ha sido el hecho de no tener que encender prácticamente el fuego, ya que muchos tienen poca cocción al ser crudos, Todavía me queda mucho por experimentar pero ha sido una muy buena introducción y lo recomiendo a cualquier persona que tenga interés en mejorar su salud y que se sienta atraído por lo verde. El seguimiento vía Facebook es muy motivador ya que todos íbamos preguntando y compartiendo consultas. Es un programa que no implica visitas ni esperas, lo haces compartiendo experiencias online con otros participantes y eso lo hace muy atractivo.” – Anna Piqué